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Decálogo de seguridad infantil en la playa

Dentro de la campaña #OjOPequealAgua contamos con nuestra inestimable amiga Pilar Naval, que nos guía por todas las playas con la mejore seguridad infantil.

Como ya sabéis en la web de la campaña de seguridad para evitar ahogamientos infantiles disponéis de todos los decálogos, post de seguridad infantil acuática y tips para compartir y difundir con el único propósito de salvar vidas.

Si desde esta cuenta y desde la Asociación Nacional de Seguridad Infantil nos hemos enfocado en la prevención de ahogamientos infantiles en piscinas, es Pilar Naval y Emergències Setmil que nos ha regalado estos consejos de prevención de ahogamientos en la playa. 

Decálogo de seguridad infantil en la playa

  1. Como en la piscina, el más importante de todos los consejos en cualquier medio acuático es OJOPEQUEALAGUA. Nunca sin supervisión y por supuesto no permitas que vaya solo o se aleje.  La playa es un lugar mágico para los peques, de diversión de más niños y niñas, de agua, de olas, de arena, de juguetes, de otros juguetes…todo le llama la atención y si esa atención es el agua, allá que irá, persiguiendo una ola puede adentrarse en el mar sin tener conciencia de los peligros que supone. Un niño necesita muy poco tiempo y muy poca agua para ahogarse.
  2. Acude siempre a playas con servicio de socorrismo y sigue siempre sus indicaciones, respetando también las banderas. Si cuando llegues a la playa y localices al SOS podrás explicarle a tu hijo donde pedir ayuda y cuál es su función y nuestra responsabilidad hacerle caso. Hacer que conozcan y respeten la figura del socorrista es seguridad en el presente y en su futuro, primero como adolescente y después como adulto. 
  3. Nunca solos, volvemos al punto 1, JAMÁS  dejes que entre solo al agua. Aprender a flotar y luego a nadar lo antes posible es una buena forma de prevenir accidentes (no la única). Si no sabe nadar utiliza un chaleco de ayuda a la flotación, cuidado con otro tipo de materiales, manguitos que se escurren, aros que no se ajustan, colchones que con las corrientes se adentran en el mar…dan falsa sensación de seguridad, no protegen frente a un ahogamiento y pueden poner en riesgo a tu peque.
  4. El sol cada vez pega más, protegerse del sol es obligado en tanto la piel infantil es muy delicada. Aplicaros (todos) crema solar con factor de protección adecuado y evita las horas centrales del día, no te excedas en el tiempo de exposición. Pon una gorra o sombrero al niño, cúbrele con ropa fina y de colores claros. Los ojos y los labios son también zonas sensibles al sol, actúa en consecuencia: gafas de sol con protección UVA y protector labial.
  5. Come sano y ligero. Evita comidas copiosas y ejercicio intenso que pueden provocar un golpe de calor fuera del agua y educa en como introducirse despacio en el agua para que nuestro cuerpo se adapte a una temperatura inferior sin sufrir un síndrome de hidrocución (el mal llamado corte de digestión de toda la vida). Los niños cuando se están divirtiendo olvidan hasta que tienen sed, haz que ingiera agua con frecuencia para evitar la deshidratación.
  6. Desgraciadamente vemos más lesiones medulares y contusiones de mayor y menor gravedad de lo que quisiéramos, no dejes que se tire de cabeza, ni que practique saltos peligrosos en la arena. Y por supuesto no lo hagas tú ni lo veas como algo exento de riesgo, recuerda que los peques crecen y que las conductas perduran, tú eres su ejemplo.
  7. Tu perspectiva difiere mucho de la de un peque. Donde tú ves una sombrilla de rallas, el solo ve un palo blanco y muchos pies. Jugar en la playa es divertido, tanto que los niños se despistan y pueden perderse entre bañistas, sombrillas… es muy fácil desubicarse, pide al socorrista pulseras identificativas, de no haberlas escribe tu teléfono sobre su piel o en una prenda de ropa que lleve puesta y dile donde lo tiene anotado. Si el niño puede entenderte dale referencias, aprenderá a orientarse, que busque al SOS y no se desplace.
  8. Ni tu capacidad y resistencia es la misma que la de tu peque. Cuando te bañes con él, aunque seas un experimentado nadador, ten en cuenta que tu capacidad es menor que si nadas solo. Los socorristas tenemos entre nuestra lista de personas con riesgo de ahogamiento a los padres con niños. Si algo ocurriera no soltarás al niño, perderás libertad de movimiento. Tenlo en cuenta y no te expongas más de la cuenta.
  9. El 1-1-2 debe ser un teléfono familiar para nuestros niños, tienen que saber que pueden llamar ante cualquier problema, si ven a alguien en dificultades en la playa que avisen al socorrista o a ti, para que llaméis al 1-1-2, ellos también pueden hacerlo si tienen un teléfono a disposición.
  10. Y sobre todo, pasadlo bien. A los socorristas nos gusta la playa, adoramos el mar y nos encanta veros disfrutando del agua y del sol.

© Pilar Naval-Emergències Setmil. Te agradezco que te unas a la campaña de seguridad infantil para evitar ahogamientos #OjOPequealAgua, que difundas y valores el trabajo que realizamos de forma altruista y cites la fuente, porque cumples la ley y porque eres buena profesional. 

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